LA PSICOLOGÍA : EL ALMA Y LA CONDUCTA HUMANA ,

lunes, 30 de septiembre de 2013

EL ORIGEN DE LA PSICOLOGÍA :

El origen de la Psicología se remonta a la edad antigua , en el siglo IV a.C. , en el seno del auge filosófico , durante el siglo de oro de Pericles , época de máximo esplendor cultural , cuya preferencia central recaía en el estudio del hombre como ser racional.

La Psicología formaba parte de la Filosofía y como tal era un saber más en este caso relacionado con los estados emocionales de las personas . 

El primer antecedente , lo encontramos en Hipócrates , quien estableció por primera vez la relación entre el cuerpo y la mente.
Elaboró la teoría de los humores, mediante la cual señaló la acción de nuestro estado anímico sobre los líquidos de nuestro cuerpo .
Fue el primero en adjudicarle a la epilepsia un origen ligado al daño
cerebral , alejándose así de las creencias mágico-religiosas .

La otra figura fue Sócrates , quien con su método : la mayéutica , sentó las bases de la psicología terapéutica con la máxima "conócete a ti mismo" .

Platón , en su escuela filosófica La Academia , sostuvo la premisa 
de que allí solo asistirían quienes supieran Geometría y Psicología.

Aristóteles fue quien escribió el primer tratado sobre el estudio del
alma , con su obra Pery psyche .







Identikit para reconocer tristeza y depresión POR FACUNDO MANES DIRECTOR DEL INSTITUTO DE NEUROLOGIA COGNITIVA (INECO) Y DEL INSTITUTO DE NEUROCIENCIAS DE LA FUNDACION FAVALORO

14/10/12
Uno de los poemas más impactantes de Miguel Hernández es aquel que habla de la pena como un perro que no deja ni se calla, “siempre a su dueño fiel, pero importuno”.
Según las neurociencias, la tristeza es una emoción básica del ser humano y ocurre, fundamentalmente, en situaciones de pérdida . Sin embargo, nuestro cerebro puede darnos una señal de tristeza en ausencia de un evento que lo justifique. Esta tristeza “sin causa” ha sido abordada desde la antigüedad. La melancolía , por ejemplo, era definida por la medicina hipocrática como “bilis negra proveniente del bazo que penetra en todos los órganos incluyendo el cerebro, produciendo síntomas depresivos” y estaba vagamente relacionada con lo que llamamos depresión .
Este concepto apareció recién a mediados del siglo XIX cuando algunos diccionarios médicos ingleses la definieron como “el abatimiento anímico de las personas que padecen alguna enfermedad”. Actualmente se reconocen como síntomas típicos de la depresión(no es necesario que estén presentes todos) el estado de ánimo decaído, tristeza o sensación de vacío la mayor parte del tiempo y en forma persistente, pérdida de interés en las actividades habituales y en la capacidad de experimentar placer, insomnio o, por el contrario, muchos deseos de dormir, agitación o el enlentecimiento motor, la fatiga y la pérdida de energía, falta o exceso de apetito, disminución del interés social y sexual, sentimientos inadecuados de culpa, inutilidad o preocupaciones económicas excesivas, pensamientos sobre la muerte, fallas de memoria y dificultades para pensar y concentrarse .
La diferencia entre la depresión y la tristeza normal ante una situación vital está dada por la intensidad, duración y el nivel de interferencia que producen en nuestro funcionamiento habitual. Datos de la Organización Mundial de la Salud demuestran que en la década del 90 la depresión era la cuarta causa de discapacidad; en 2004, subió al tercer lugar y se calcula que para 2030 será la principal causa de discapacidad en el mundo . Es frecuente ver que en una familia, varios integrantes padecen o han padecido depresión. Sin embargo, no se ha descubierto aún “el gen de la depresión” y es difícil que se lo encuentre . La genética nos muestra que los genes confieren sólo predisposición para determinadas enfermedades.
Para que éstas se manifiesten, son necesarias ciertas influencias del ambiente .
La mayoría de las enfermedades mentales se corresponderían a este tipo de interacción. Un ejemplo de esto lo refleja el trabajo del investigador británico Avshalom Caspi, que demostró la relación entre la exposición a estrés infantil y el desarrollo posterior de la depresión . La depresión es una enfermedad que afecta el normal funcionamiento del cerebro de quien la padece y también de quienes lo rodean.
En las últimas décadas, el tratamiento de los trastornos del ánimo ha sufrido enormes cambios.
Hoy se cuenta con muchas herramientas para tratar la depresión.
El trabajo interdisciplinario se transformó en el verdadero “estado del arte” en el tratamiento de la depresión. Y, aunque la mayoría de las personas con depresión puede mejorar, se calcula que sólo del 15 al 30% de los pacientes con depresión reciben tratamiento .
En la última estrofa del poema de Miguel Hernández, uno de sus versos dice: “no podrá con la pena mi persona”. La ciencia trabaja para mejorar la calidad de vida. En el caso de la enfermedad de depresión, parafraseando el poema, para que puedan las personas con la pena. Resulta central para condiciones como ésta reconocer la enfermedad cuando ocurre y buscar ayuda . Ojalá que esta columna resulte una contribución para esto.
www.facundomanes.com  
DIARIO CLARÍN .

La depresión: un nuevo humor negro Según la OMS, el número de deprimidos sólo es superado por el de enfermos cardíacos. Ante esta proliferación, psicoanalistas se preguntan si se trata de un mal de la época o si en verdad la industria de los fármacos pone bajo un mismo rótulo de "enfermedad" a afecciones con matices que van de la melancolía a la tristeza y la manía.

Hoy los seres humanos han llevado tan adelante su dominio sobre las fuerzas de la naturaleza que con su auxilio les resultará fácil exterminarse unos a otros, hasta el último hombre. Ellos lo saben; de allí buena parte de la inquietud contemporánea, de su infelicidad, de su talante angustiado.
Sigmund Freud
***
Nunca sabía de dónde venía y probaba de todo para sacudírmela de encima, pero nada funcionaba.
¿Qué probabas?
Bueno, probaba todo eso, todos los antidepresivos que había antes del Prozac: el Demerol, la desipramina, los inhibidores de la MAO.
¿El Valium? ¿Las morfinas?
No, morfina no. Eso habría sido mortal. Pero probaba de todo, hasta el Zoloft y el Wellbutrin. Probaba todo lo que tenían. La mayoría de esas sustancias hacían que me sintiera peor que antes.
De modo que sos un experto en esos productos farmacéuticos cuando se trata de la depresión.
Creo que sí. Pero nada funcionaba.
Leonard Cohen

*** 
Hace poco más de un mes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) hizo públicas las cifras sobre la cantidad de personas afectadas por alguna forma de la depresión en los 194 países donde ese instituto tiene sedes y se supone mide y evalúa el estado de la población, en este caso, de su salud mental. Las cifras resultan alarmantes: 350 millones de personasdeprimidas sobre un total de 7 mil, con las consecuencias que ese dato tiene para la estabilidad del lazo social, la economía, la demografía y el supuesto de que en el futuro, eldolor de vivir, si no desaparecería, al menos, gracias a los avances de la farmacología, estaría herido de muerte.
Por el contrario, todo parece indicar que hay una involución causada por una multiplicidad de factores entre los que no deberían descartarse los “errores” en los diagnósticos, los intereses electorales en juego y una concepción de la biopolítica como dispositivo de homogeneización masiva y operador de una devolución de los sujetos, acobardados, individualizados y vigilados, al universo de la producción.
En la provincia de Santa Fe, a la depresión le ha seguido el autismo, que por una ley provincial, apoyada por todos los bloques, primero se intentó ahogar el tratamiento de los autistas por medio del psicoanálisis y después, por el esfuerzo de analistas de esa provincia y el apoyo incondicional de Jacques-Alain Miller y Judith Miller, se logró levantar la tapia (que incluía como definición de ese modo de ser la propuesta por el DSM) a un sistema más abierto, de acuerdo a los casos. Sin embargo, eso no quiere decir que el poder de lobby de la industria farmacológica y de los cognitivistas haya cedido sino que se ha redoblado, pero con menos esperanza de un “triunfo” en todo el frente y que continúa. Esa discusión, idéntica o muy similar, es la que se está librando en Francia.
El psicoanalista francés Eric Laurent –que en unos días más llegará a la Argentina–, conversó con Ñ digital desde París. “La depresión de la cual habla la OMS es una enfermedad nueva producida como tal en la encrucijada entre diversas extensiones semánticas. La primera es la compresión de una serie de trastornos, y la segunda, la integración completa con las indicaciones farmacológicas”.
-¿Cómo entender eso?-Fácil: las enfermedades, antes distinguidas cualitativamente, ahora lo son cuantitativamente (grado de gravedad del trastorno). Esto produce el mismo efecto de los llamados espectros del autismo, una extensión sin límite asignable por decreto epidemiológico (tipo DSM).
“Por eso la integración con la industria farmacéutica gracias al manejo de los ECR (ensayos clínicos randomizados) –es decir, asignar, aleatoriamente, a los participantes en un ensayo a dos o más grupos de tratamiento o de control–, permite promover también una extensión de la depresión sin límites claramente definidos (por ejemplo, la tentativa del DSMV de introducir la prescripción a un nivel infraclínico).
“La tercera es la extensión global de las categorías a través de metáforas que permiten introducir la depresión en culturas que no tenían a su disposición la descripción de esastimmung (atmósfera). El ejemplo clásico es Japón, donde el marketing produjo la metáforacatarro del alma.
“Pero estas tres extensiones no explican todo porque existe un gusto y un temor a desear; en otras palabras: resistir la presión identificatoria por una depresión implica un modo de rechazo que puede ir hasta la forclusión.
“Y como las mujeres padecen depresión tres veces más que los hombres, y ahora se hacen escuchar, el conjunto  forma parte de la feminización del mundo”.

Ahora bien, ¿qué se quiere decir cuando se dice depresión?
El psicoanalista Gerardo Arenas es claro. “Efectivamente, las cifras son alarmantes en algún sentido. Según creo haber leído (en ese informe o en uno similar), el número de deprimidos sólo es superado por el de enfermos cardíacos. El gran desafío es cómo leer esas cifras, y qué hacer con ellas”.
“En primer lugar, es necesario preguntarse qué criterios se toman para clasificar a 350 millones de personas bajo una misma etiqueta. La disolución de la clínica clásica (con sus finos y delicados matices diagnósticos), más su remplazo por cuestionarios estandarizados en función de manuales (los DSM y similares), han erradicado del mapa las precisas nociones de melancolía y locura maníaco-depresiva (dos padecimientos de muy baja incidencia en la población); y se han sustituido por la noción de bipolaridad (una categoría más amplia y, por ende, capaz de incluir muchos más casos), y finalmente han producido el grueso pseudoconcepto depresión, tan desdibujado y amplio que, más que un diagnóstico debería considerarse una bolsa de gatos. Es difícil saber si la enorme cifra informada por la OMS se debe a que hay cada vez más gente deprimida o cada vez menos psiquiatras clínicos”, ironiza sobre un fondo tenebroso.
Y continúa. “En segundo lugar, los criterios empleados son tan amplios, arbitrarios y difusos, que cabe incluso preguntarse si en todos los casos así catalogados estamos hablando de una verdadera enfermedad (que, además, debería ser tratada y, si todo va bien, curada). Según la OMS, la depresión ‘se caracteriza por la presencia de tristeza, pérdida de interés o placer, sentimientos de culpa o falta de autoestima, trastornos del sueño o del apetito, sensación de cansancio y falta de concentración’.
“Ahora bien, supongamos uno de los españoles desalojados tras la ruptura de la burbuja inmobiliaria. Perdió el trabajo y por eso perdió su casa, sus ahorros, y además contrajo una enorme deuda con el banco, que no tiene cómo pagar. Es muy probable que se sienta triste, que pierda el interés por las cosas, que no sienta placer, que se culpes por haber querido comprar una propiedad o que su autoestima se haya ido a pique por no haber podido pagarla o por no tener empleo, y que eso le quite el sueño, el apetito, lo canse y no le permita concentrarse. Pero según la OMS, no tiene la reacción más lógica y humana que pueda pensarse frente a la iniquidad del mercado financiero en connivencia con el gobierno de turno, sino que en verdad... está enfermo, y su enfermedad se llama depresión
“Hay más de un millón de españoles en esas circunstancias, y no quiero pensar en cuáles serán las cifras en el resto del mundo. Lo que sí vale la pena pensar es cuántos de los 350 millones de deprimidos (según la OMS) están en la misma situación que estos. ¿Será necesario pensar que si te pasa todo esto es porque estás enfermo, deprimido, y que entonces bueno sería que te recetaran alguna pastillita contra la depresión, o más bien deberíamos pensar que si esto no te sucede se debe a que eres extraterrestre o no corre sangre por tus venas?
“Obviamente, la OMS considera que es una enfermedad, ya que en caso contrario no tendría el descaro de hablar de epidemia, y no dudo que muchos de los hombres y mujeres sustituidos por un número que los representa dentro de esos 350 millones deben de tener algún síntoma que merezca atención y tratamiento. Pero es imposible saber cuántos.

Si las mujeres se deprimen tres veces más que los hombres, son objeto privilegiado de la llamada violencia de género y existe cierto aire de época donde el sujeto masculino parece estar de más, suena pertinente escuchar a una mujer, psicoanalista y argentina, Gabriela Grinbaum.
“Es un hecho que la depresión es un signo de la época. Por un lado lo vinculo a la exigencia posmoderna: hay que pasarla bien y todo el tiempo, lo que se vuelve para el sujeto un ideal inalcanzable y esto puede conducir a estados depresivos.
“En un mundo en el que se manifiesta el desengaño, el cinismo pulula, los valores están devaluados, allí donde reina el imperativo del amo que exige gozar, se entiende que los sujetos se depriman.
“Y es bien cierto que el discurso actual no quiere a la depresión ya que ella va a contrapelo de la producción y eso ha venido como anillo al dedo a la industria de los laboratorios que reinventan la píldora de la felicidad cada día.
Pero, siempre hay un pero.
“Encuentro –dice la especialista– que el aumento de la depresión, en particular entre las mujeres, se debe a la falta de amor. Nadie en este mundo desconoce que el amor es la mejor de las píldoras de la felicidad; el amor es entonces el tratamiento natural de la tristeza. Y en tanto que ser amada, para la mujer, equivale a adquirir un ser, ser algo para alguien, el amor es lo que funciona como efecto antidepresivo en las mujeres, pero sabemos que no ocurre todos los días.
“Pero cuando el amor se produce y la depresión se reduce, existe el riesgo del desencanto y las consecuencias van desde el duelo más extremo, la pérdida de las ganas de vivir hasta las peores cobardías morales.
Es que no existen cláusulas ni aseguradoras ni garantías que sostengan al amor ni al deseo en un mundo estragado por el individualismo que se disfraza de ecumenismo o nuevo humanismo, semblante de concilio que estos días se escucha como fracasa, estrepitosamente, en Medio Oriente.
Psicoanalista y especialista también en las consecuencias subjetivas de las enfermedades de transmisión sexual, Carlos Gustavo Motta se orienta en la misma dirección: “la OMS dice que la depresión es el mal de la época; y el panorama continuará empeorando. El mal de Saturno existe con esa denominación desde la antigüedad, tal como lo han referido Raimond Klibansky, Erwin Panofsky y Fritz Saxl en Saturno y la melancolía. La escuela francesa, a partir de 1854, describió una patología que llamó folie circulaire o folie a double forme, donde los pacientes experimentaban de forma alternativa estados de depresión con estados de manía.
“Atrapados en un vacío y divorciados del deseo, el trastorno resultó en una época el peor de los pecados. Ese sentimiento de tocar fondo representaba nada más y nada menos que un corte entre el sentido y un vacío de sentido.
Robert Burton en Anatomía de la melancolía, al contrario que la nueva propedéutica, afirma que no existe un remedio universal para este mal.
Motta: “este desgaste de sentido se intensifica de acuerdo a la estructura psíquica singular teniendo un carácter insoportable en las variables del ánimo. El concepto de Big Felicidadpropuesto por la industria farmacológica nunca esclarece de entrada los efectos adversos de una medicación. La promesa de transitar por un parque de diversiones no incluye que allí mismo nos encontremos con la pequeña Tiendita del Horror (fundante) de cada uno. Este comentario admite además que en algunos casos el recurso de los antidepresivos puede revelarse eficaz y hasta permite ser coadyuvante al tratamiento analítico (el buen uso del medicamento que le dicen)”.
Pero “la propuesta cognitivista que entiende como ventaja en el tratamiento de la depresión el desarrollo del pensamiento lógico que asegura la mejor forma de confrontarse a los obstáculos proponiendo así cambiar las creencias y pensamientos depresores, a decir verdad, no dista en nada del psicoanálisis, que brinda el método de la asociación libre asegurando así la máxima introspección”.
Porque “la depresión resulta extranjera para uno mismo. Y es probable que un proyecto construido en relación al deseo ubique un límite a un vacío insostenible dando paso a un vacío necesario. Contingencia posible indiferente al tiempo, algo así sostenía Oscar Wilde cuando señalaba que las desgracias que podemos soportar vienen del exterior y por eso se consideran accidentes. Pero cuando se sufre por las propias faltas ahí se encuentra el tormento de la vida”.
La joven psicoanalista Luján Iuale, sin perder de vista el informe, sitúa la cuestión en coordenadas más clásicas: “la depresión se ha constituido en uno de los nombres del malestar en la cultura, y como tantos otros, ha proliferado. Y uno de los problemas centrales es que como todo lo que de pronto se hace masivo, tiende a perder especificidad”, dice.
“Suele nombrarse como depresión a una serie de afectos de lo más diversos: tristeza, angustia, desgano, desazón, falta de interés por la vida, insatisfacción, entre otros. Esto hace que el famoso estoy deprimido se disemine con rapidez. Claro que muchas veces no es el propio sujeto el que se nombra, sino el agente de salud que sanciona el usted está deprimido”.
“Bajo este manto poco piadoso se suele perder de vista que estar triste por una pérdida no es estar deprimido. La tristeza es indicio de afectación. ¿Alguien se imagina una vida sin afectos, sin sensaciones, sin sentimientos? Y por otro lado ¿qué hacemos con lo que sentimos? ¿Le damos lugar, lo acallamos, lo rechazamos como si no existiese? Creo que como sociedad tenemos que proponernos una interrogación rigurosa de lo que es para el ser hablante encontrarle un sentido a la vida, antes que cerrar la cuestión en términos psicopatológicos”.
¿Aclarar más? Oscurecería.-
REVISTA Ñ - 22 DE NOVIEMBRE DE 2012 - POR PABLO E. CHACÓN .

24.06.2013 | CRIANZAS POLÉMICAS Nueve consejos para echar a perder a un niño La licenciada Mónica Coronado, autora del libro "Padres en Fuga. Escuelas Huérfanas", repasa, con ironía, las diversas maneras en que los adultos convierten a un niño que podría ser "sano" y "feliz" y en un chico terrible, incapaz de convivir en un entorno reglado.

1) El niño REY, tirano, dictador:
Cuando nazca dejá de lado todo: pareja, salud, otros familiares, hobbies o actividades deportivas. Dedicate al niño en forma exclusiva y excluyente. Tu pareja puede esperar, lo mismo tu salud, tu vida personal... ¿Qué es eso? Eso que hacías y te hacía feliz, como hacer ejercicio, leer, tener un hobby, charlar con amigos, etc. Tu objetivo de vida debe ser estar pendiente del niño. Hacé de tu maternidad/paternidad una cruzada.
2) "Lo que quieras con tal que dejes de chillar": Los niños, todos, tienen berrinches. Si querés echarlo a perder no dejes que el berrinche llegue, apenas frunza el ceño tratá de concederle todo lo que desea, aunque sea inadecuado. Apenas ensaye unos pucheros porque no le comprás ese juguete, corré a conseguirlo, no vaya a ser que el niño sufra por no tener lo que el 0,02% de los niños tienen.
3) No...pero: Si considerás que lo que el niño quiere es descabellado (como, por ejemplo, jugar con el florero de cristal de tu tía Clarita), intentá parecer una buena madre o un buen padre y decile un NO adornado de excusas, explicaciones e intentos de razonamiento. Indudablemente el niño hará un berrinche de proporciones descomunales, con cortes de respiración y sofocos fríamente calculados como para causarte la suficiente ansiedad, inquietud o culpa como para que, finalmente cedas real o vicariamente a sus deseos.
4) No quiero traumatizarte: Los límites verbales, penitencias, retos o cualquier medida de sanción no le van a funcionar cuando quieras echarlo a perder, todo lo contrario.  Insistí en que el niño debe desarollarse según su "naturaleza", sin que le pongas restricciones de ningún tipo. Si quiere dormirse a las 12 y media de la noche, dibujar las paredes recién pintadas, comer en el piso, hacer pis en una maceta, acariciar abofeteando a padre y abuelos, atropellar a otros niños para obtener un juguete, tenés que dejarlo que actúe a sus anchas, o ¿no son así todos los niños/as? No permitas que ninguna frustración, por pequeña que sea, nuble su esplendorosa infancia.
5) El niño florero: en cualquier reunión social, tu niño debe ocupar un lugar preeminente. Las conversaciones, por más elevadas que sean, deben interrumpirse para escuchar primero sus balbuceos, luego sus gritos, canciones o lo que el niño haga, incluyendo, por supuesto, sonidos indecorosos.
6) Pero... ¡Si es superdotado!: Ya seguramente te habrás dado cuenta de que tu niño es especial; todas sus acciones manifiestan una inteligencia muy por sobre lo normal, a su lado cualquier niño de la misma edad parece una lechuga mustia. Debe haber algo de cierto en eso de "de tal palo tal astilla", el niño seguramente es una copia mejorada de vos. Por eso, aun cuando el resto de la gente lo considere perfectamente común, vos sabrás que es extraordinario y que no tenés que dejar de lado cualquier oportunidad de mostrarlo al mundo.
7) ¡Qué va a saber tu maestra/o!. Si querés continuar tu tarea de echar a perder al niño, cuando ingrese a la escuela no pierdas la oportunidad de hablar mal de su maestra/o, de contradecirla/o en sus pautas o de discutir con ella/él frente al niño. Si querés echar a perder a tu niño debés descalificar la acción educativa de cualquier agente externo a su propia persona y, sobre todo, interferir en cualquier puesta de límites.
8) Y todo a medio hacer...: Para echarlo a perder debés permitir que deje todo a medio camino. Si se sienta a comer puede levantarse cuantas veces quiera, no le exijas guardar los juguetes luego de jugar, ni los útiles dentro de la mochila, ni promuevas la formación de ningún hábito que coarte la libre expresión de su personalidad. Que se lave los dientes o tire la cadena si quiere, pues vos no te vas a fijar en esas nimiedades.
9) El cliente, perdón... El niño, tiene siempre la razón: Ya te debés haber dado cuenta de que la gente no advierte lo especial, inteligente y destacado que es tu niño. Si lo querés echar a perder y la gente que lo rodea no colabora en tu tarea, podés pensar que todos se la agarran con él o lo rechazan porque es superior en belleza, inteligencia, talento y demás a los otros niños. Debés apañarlo, cubrirlo o justificarlo en cualquier acción, por deleznable que sea, también excusarlo permanentemente o defenderlo a muerte. Siempre le echan la culpa a él, pero ¡si no ha hecho nada!
Empiezan entronizados, idolatrados, adorados, como pequeños tiranos, dorados reyes o emperadores, pronto se convierten en temibles dictadores, y muchos de ellos llegan a ser esos adolescentes sin rumbo. El exceso de atención, la sobreprotección, obstaculiza los procesos de desarrollo y el logro progresivo de autonomía, que es un proceso que tiene muchas pequeñas frustraciones (cosas que no puede hacer, que no puede tener), que además de ser parte de la vida, le permiten aprender a soportarlas (tolerarlas), avanzando en su madurez y preparándose para la vida.
Los niños necesitan muy poco para vivir: alimento, cuidados, amor, respeto, abrigo, oportunidades para aprender, límites, compañía, diversión, etc. Muchas de esas cosas no tienen precio.

Fuente: Mónica Coronado. Psicopedagoga. Especialista en el abordaje de la relación entre Familia y Escuela en la actualidad. Autora de "Padres en Fuga. Escuelas Huérfanas". Ed. Noveduc.
ENTREMUJERES .

El Proceso de Convertirse en Terapeuta by:CN - Blog

JUEVES, 13 DE DICIEMBRE DE 2012


¿De qué están hechos los terapeutas? Según Otto Kernberg


Hace dos años y dos meses, en octubre del 2010 la doctora Chanda Randin realizó una larga e interesante entrevista al conocido psicoterapeutaOtto Kernberg la cual fue publicada en Psychotherpy.net, de todos los puntos  de esa conversación el tema final que ella tituló “What are Good Therapists and Analysts Made Of?” es de particular importancia para nosotros como parte del proceso de convertirnos en terapeutas, por lo que hemos decido transcribirla y publicarla en español.

CR: ¿Tiene alguna idea acerca de las características de personalidad que un analista o terapeuta necesita tener para poder trabajar con los trastornos severos de personalidad o trastornos de personalidad, incluso leve?
OT: Esa es una buena pregunta. Al mirar a nuestra experiencia, hemos capacitado a muchos terapeutas. Hemos tenido 20 años de entrenamiento y supervisión. Creo que gente con personalidades muy diferentes pueden convertirse en muy buenos terapeutas. Yo no tengo nada profundo o nuevo que decir sobre esto que no pueda ser dicho por cualquiera con cierta experiencia en este campo. Creo que es importante, en primer lugar, que el terapeuta sea inteligente, eso ayuda. En segundo lugar, que sea emocionalmente abierto y que posea una personalidad  suficientemente madura, por un lado, y abierto a la experiencia primitiva, en contraste con alguien extremadamente restringido. Ayuda a no ser excesivamente paranoico, infantil u obsesivo-compulsivo. Aunque, estoy diciendo excesivo porque tenemos todo tipo de terapeutas, todos básicamente, honestos consigo mismos y los demás, con la voluntad de aprender. Por lo tanto, ayuda a no tener demasiado narcisismo patológico. Si se es demasiado narcisista,  no se tiene la paciencia para trabajar con pacientes muy problemáticos, y la capacidad deempatía es limitada.

CR: Pero también parece que necesita una buena dosis de esas cosas.
OK: Sí, algunos de nosotros estamos explorándolo. Realmente no tengo una buena respuesta para eso. Pero hay algunas personas que tienen un talento para ello, al igual que las personas tienen talento para tocar el piano. No sé si los expertos dirían, qué personalidad se necesita para tocar el piano? Hay algunas personas que tienen el talento. Algunas personas son capaces de hacerlo casi sin ningún entrenamiento. Es casi aterrador, saben las cosas antes de que les enseñemos. Es malo para la autoestima! He tenido terapeutas con los que he tenido la sensación de que existe tal capacidad innata que con poco ... florecería. Y otros que nunca aprendieron, a pesar de ser inteligentes y esforzados. Y no soy capaz, en este punto, de explicar exactamente lo que es. Sin embargo, podemos descubrirlo.
Muy sencillo, le decimos a la gente que quiere entrenar "Tráenos una cinta. La mejor cinta que tengas, de cualquier sesión que se estés llevando a cabo, una cinta de vídeo con un paciente en el tratamiento." Y hemos desarrollado métodos de la interacción psicoterapéutica por el cual podemos resolver quién tiene el talento para hacerlo. Podemos evaluar muy rápidamente con el tratamiento manualizado si el terapeuta es capaz de adherirse y si el terapeuta es competente.
 La competencia es vista por el terapeuta hablando, centrándose en lo que es relevante, centrándose en lo que es relevante con claridad, haciendo que sea relativamente rápido y en profundidad. La pertinencia, claridad, velocidad, profundidad. La combinación de ellos nos dicen que es un buen terapeuta. Es terriblemente simple, y funciona.
Y yo te digo que algunos psicoanalistas experimentados son terribles, y algunos jóvenes aprendices son muy buenos. Esto crea el problema: no hay que ser un psicoanalista para hacer este tipo de tratamiento? Yo diría que ayuda a tener una formación psicoanalítica, pero no es indispensable. Hay algunas personas que tienen tanto talento que pueden hacerlo sin la formación psicoanalítica, aunque, una experiencia psicoterapéutica personal siempre ayuda, especialmente si la gente tiene una especie de "punto ciego" en un área determinada. A veces una psicoterapia psicoanalítica o tratamiento psicoanalítico ayuda.
CR: Usted ha escrito sobre la importancia de la seguridad del terapeuta. Yo no había oído a nadie expresar  tan claramente  esto  antes. La habilidad de ser capaz de sentir cuando la seguridad es un tema parece tan primario. Así que todas las cosas de las que usted está hablando-su propia conciencia de sí mismo, para poder tener el conocimiento de estas áreas, a saber cuándo algo es un problema. Es muy importante para la seguridad como terapeuta y también la cantidad de seguridad que se puede brindar al paciente.
OK: Exactamente. Se le permite mantener el marco del tratamiento. Es absolutamente esencial. El terapeuta tiene que mantener el control sobre la situación terapéutica. El terapeuta tiene que estar a cargo. Hay una autoridad realista del terapeuta que tiene que ser diferenciada de autoritarismo, a saber, el abuso de esa autoridad. Hay una especie de un movimiento cultural hacia la "democratización" de la relación psicoterapéutica. Creo que eso es una tontería. Dado que los pacientes acuden a nosotros porque tenemos cierto experticio, de lo contrario no habrían llegado a nosotros. Hay una diferencia entre autoridad y autoritarismo. Y parte de la autoridad del terapeuta depende de que el terapeuta sea capaz de mantener el marco del tratamiento. Y nuestra propia seguridad es esencial en este sentido. Al tratar los trastornos severos de la personalidad se vuelve crucial ... físico, psicológico, la seguridad jurídica, en este país que es tan litigiosa. Es la cultura más paranoica que yo conozco en el mundo civilizado. No he estado en la selva ...
(...)

11.01.2013 | SOÑAR NO CUESTA NADA… ¿O SI? 5 cosas que no sabías sobre tus sueños Según Sigmund Freud, el padre del psicoanálisis, los sueños sirven para comunicar todo lo que la mente consciente no puede aceptar. Así, son, para él, la vía de expresión de los deseos reprimidos de las personas. Sin embargo, investigaciones sugieren que no sólo es posible controlar nuestros sueños, sino que éstos nos ayudan a borrar malos recuerdos.

* El sueño ayuda a borrar malos recuerdos. “La fase del sueño en la que hay actividad onírica –es decir, en la que soñamos- está basada en una composición neuroquímica diferente y nos proporciona una forma de terapia, un bálsamo que elimina los ‘bordes afilados’ de las experiencias emocionales vividas durante el día”, afirmó Matthew Walker, neurocientífico de la Universidad de California en Berkeley, Estados Unidos, tal como publica el sitio MuyInteresante.es. Esta fue la conclusión de un estudio que reveló que, “mientras soñamos, la química cerebral vinculada al estrés se desactiva (desciende la norepinefrina) y el cerebro puede procesar las experiencias emocionales para ‘borrar’ o ‘suavizar’ las emociones dolorosas o desagradables almacenadas en la memoria. “Después de dormir las experiencias del día anterior han reducido su carga emocional; nos sentimos mejor con ellas, nos sentimos capaces de afrontarlas”, explicó el científico.
* Durante el sueño se organiza la información del día.Mientras que el acto de dormir sí es una función vital, soñar no es necesario para la vida, no es imprescindible para seguir viviendo. Sin embargo, mientras el cuerpo descansa, el cerebro “soñador” se encarga de ordenar la información importante y “guarda” en la memoria permanente lo que considera relevante.
* Podemos controlar lo que soñamos. Cuando una persona es capaz de alterar el contenido del relato onírico se dice que experimenta sueños lúcidos. Una psicóloga de la Universidad de Harvard, Deirdre Barret, hizo una prueba con sus estudiantes: les pidió que eligieran un problema que no tenían resuelto y que pensaran en él antes de dormir. Después de una semana, la mitad de los chicos había tenido sueños vinculados con ese problema y el 25% había encontrado alguna respuesta sobre la cuestión. Así, el mejor modo de controlar nuestros sueños será elegir nuestros pensamientos antes de dormir.
* Los olores afectan los sueños. Científicos alemanes presentaron una investigación en la Academia Americana de Otorrinolaringología que comparaba los efectos de oler a rosas y a huevo podrido durante el período de sueño. Según sus conclusiones, el tono emocional de los sueños cambia en cada caso: es positivo en el primero y negativo cuando el olor es desagradable.
* Más sueño, menos dolor. Durante el período de descanso, atravesamos por diferentes etapas o fases. Una de ellas es la REM (de la frase en inglés “rapid eye movement”, por el movimiento de los globos oculares bajo los párpados), que es el período donde soñamos y captamos gran cantidad de información de nuestro entorno, debido a la alta actividad cerebral. En esos momentos, las sustancias químicas que generan el estrés dejan de producirse. Además, tal como concluyó un estudio neurocientífico de la Universidad de California en Berkeley publicado por MuyInteresante.es, se “suavizan” los recuerdos dolorosos.
ENTREMUJERES .

12.01.2013 | MENS SANA IN CORPORE SANO 15 tips para cuidar la salud mental Somos mucho más que un tratado de anatomía. Atender y mimar al corazón, la mente y el espíritu es importante para prevenir enfermedades y multiplicar el bienestar.

Mantener el estrés bajo control es uno de los puntos fundamentales para estar mejor. Tanto en el trabajo como en el hogar se multiplican los factores que ayudan a desequilibrarnos. Cómo empezar a cortar con el problema.
1) Aprendé a detectar los síntomas del estrés. Aminorar sus efectos negativos es indispensable para un bienestar completo. Si tenés dolores de cabeza, de espalda, insomnio, apatía, pesadillas y cambios de humor, podés estar sufriendo de estrés. Consultá a un médico ya.
2) Alertas. Si tenés una úlcera, caída del cabello, sarpullidos, constipación, diarrea, anorgasmia o compulsión a comer, podría ser indicación de que el problema radica en tu mente antes que en su físico. Visitá a un profesional.
3) Un buen estado físico ayuda a manejar niveles lógicos de estrés. Una dieta sana, menor consumo de alcohol, abandonar el cigarrillo, disminuir el café y hacer ejercicios también colaborarán con tu salud mental.
4) Escuchá música. En casa, en el trabajo, en el colectivo. La música que prefieras. Podés llegar un aparato reproductor portátil y poner así un agradable filtro entre los agresivos ruidos de la “civilización” y tu cerebro.
5) Programá tus recreos. Así como en el colegio cada 45 minutos nos daban permiso para salir a jugar, como adultos tenemos la misma necesidad. Interrumpí tus tareas, estirate, distraete. Rendirás más y mejor.
6) Tomate tu tiempo para comer. Engullir la comida a grandes bocados no es lo mejor para tu sistema digestivo; tampoco para tus niveles de estrés.
7) No sobredimensiones las malas noticias. Todo el mundo tiene problemas, sean afectivos o laborales. Y además, vivimos en una sociedad muy compleja. Si uno se engancha, dan ganas de irse a vivir a Marte. La realidad es seria, pero no terrible. Y también existen las buenas noticias.
8) Viejo proverbio chino. Repetilo: “Si el problema tiene solución, no tiene sentido preocuparse. Si el problema no tiene solución, tampoco tiene sentido preocuparse”. Te ayudará a encontrar más rápido una salida o te permitirá encarar el asunto desde otra perspectiva, sin pánico.
9) Concedete caprichos. Cada tanto, un masaje porque sí, un baño de inmersión, la compra de algo no planificado, una salida espontánea y otras variantes ayudan a relajar la mente. No se puede vivir siempre con la disciplina de un monje tibetano. Es estresante.
10) Respirá. Ante situaciones de estrés, el cuerpo humano reacciona igual que lo hacía hace miles de años en presencia de un predador: lleva la sangre a los miembros inferiores y genera una respiración agitada y superficial. Si respirás profundamente ante un inconveniente, podrás analizarlo con más calma.
11) El cerebro no es un músculo, pero no está mal entrenarlo. Participá en juegos que te exijan pensar, leé, disfrutá buen cine, anotate en un curso de algo que te guste. Un cerebro entrenado tarda más en mostrar signos de deterioro.
12) Establecé prioridades. Una meta a lograr es trabajar con inteligencia, utilizando la tecnología, delegando responsabilidades, con un plan de tareas y de objetivos. Con prioridades claras nos preocuparemos más por lo que importa y menos por lo superfluo.
13) El entorno es muy importante. Si bien a veces no hay más remedio que trabajar ocho horas por día en una oficina sin ventanas, o el presupuesto alcanza sólo para un dos ambientes con vista al pozo de luz, siempre queda el recurso de poner una planta, pintar con colores claros, elegir un cuadro que invite a soñar.
14) Disfrutá la naturaleza. Un paseo por la playa, un día de campo, una excursión al parque pueden hacer más por su salud mental que supuestas distracciones propias de las grandes ciudades, como ir al shopping, hacer cola para conseguir entradas a un evento multitudinario o tomar café tras café en un bar con el humo de los colectivos en la nariz.
15) Respetá tus horarios y programaciones vinculadas a tareas y compromisos, pero sé flexible si una eventualidad te impide cumplir con lo planeado. La rigidez extrema sólo ayudará a alterar tu equilibrio mental.
Coleccionable VIDA SANA. Clarín+ ByD Contenidos

13.05.2013 | BÚSQUEDA LABORAL Los 15 currículums más originales Diseñadores gráficos, ilustradores y artistas ponen en juego sus habilidades desde el primer contacto con su posible empleador o cliente. Ideas para armar tu propio CV. Los especialistas piden no descuidar la claridad y la facilidad de lectura. Sabrina Díaz Virzi sdiazvirzi@agea.com.ar / @sabridiaz

Un currículum armado en video, en tela o contado como historieta llamará la atención de aquel que lo reciba. Sobre todo, si la tarea de esa persona consiste, justamente, en evaluar CVs. Un formato original e innovador puede sembrar la curiosidad y aumentar la posibilidad de ser “recordado” por el selector o persona “objetivo”.
Para Sofía Scagliotti, Directora de Negocios de HR Consulting, “el mercado online permite a la persona jugar con su presentación, haciéndola más novedosa y no tan tradicional. Dependiendo del seniority, uno tiene más o menos libertades: para un mayor seniority, se busca una mayor tradicionalidad”.
La creatividad es un factor importante en actividades como diseño, marketing, publicidad, imagen o comunicación. Marcela Milesi, licenciada en Recursos Humanos y columnista de Entremujeres, dice que, “en estos casos, se puede utilizar el CV como una herramienta más para mostrar sus competencias. Por ejemplo, en el caso de una persona que aplica a un puesto relacionado con diseño, que explote la imagen; en el caso de una persona que aplique a un puesto relacionado con comunicación institucional, será relevante el uso apropiado de las palabras”.
María Olivieri, Manager de la división Finanzas de Page Personnel, indica que “hay que ser muy astuto y tener en cuenta las herramientas del marketing personal para lograr que el CV sea atractivo desde la información -y no desde el diseño- para poder concretar la entrevista. De nada sirve tener un CV fuera de lo tradicional si no encontramos la información que necesitamos para poder analizar en forma preliminar a un candidato”.
En este sentido, Milesi comenta que “es clave que, más allá de la originalidad, sea claro y que sea de fácil lectura. Muchas veces ponen foco en el diseño y no así en su contenido. Recomiendo que sea un mix entre ambos conceptos”, comenta Marcela Milesi. “La creatividad tiene que poder vivir con la simpleza, para que se pueda tener una lectura rápida”, concluye Scagliotti.
ENTREMUJERES .


21.07.2013 | TEST PROYECTIVO Test de la casa, el árbol y la persona: ¿Qué significa? Los procesos de selección de personal pueden incluir este tipo de tests. En el H.T.P te piden que dibujes estos tres estímulos. Qué representan, qué analizan los expertos y algunos puntos a tener en cuenta a la hora de hacerlo. Marcela Milesi

El test de la casa, el árbol y la figura humana (conocido como H.T.P por sus siglas en inglés) es una técnica proyectiva, creada por el psicólogo estadounidense John Buck compuesta por tres estímulos definidos y orientados a conocer rasgos puntuales de la persona que lo realiza.
Cuando dibujamos, proyectamos sobre el papel determinados aspectos o características de nosotros mismos, que podemos conocer o no, ya que esta proyección es inconciente e involuntaria. Básicamente, cuando efectuamos la acción de dibujar, estamos representando aquello que sentimos y tenemos incorporado como modelo mental y no lo que vemos desde un punto de vista objetivo, sino empático. Por lo tanto, la casa no será una reproducción, sino una representación.
Cada persona es única e irrepetible, como consecuencia de ello, no existe un dibujo igual a otro, tal como sucede con nuestra letra y firma. Si bien hay ciertos parámetros y respuestas esperables frente a la consigna, según la edad y nivel educativo, no hay una única respuesta correcta, ni manera de hacerlos.
Cada puesto laboral cuenta con especificaciones en cuanto a competencias blandas y lo que se buscará en una evaluación psicotécnica es conocer si la persona cuenta o no con éstas y cuál es su potencialidad para desarrollarlas.

¿Qué se analiza con el H.T.P?
El dibujo de la casa representa las relaciones interfamiliares. Cómo interpreta el sujeto su vida hogareña, su situación familiar y la imagen de él mismo en relación a este ámbito. Nos permitirá tener una idea de cómo impacta su mundo familiar en su hacer cotidiano y su capacidad productiva.
El árbol representa lo más profundo e inconciente de la personalidad, tal como sucede con el análisis e interpretación de la firma, nos hablará de aquello que guarda la persona para sí misma.
La figura humana representa su autoconcepto, el ideal del yo, si existe alguna representación o identificación con alguien de su mundo afectivo. Nos muestra su comportamiento social, cómo se relaciona con el mundo. Al igual que el análisis de la letra, nos permite conocer como es su mundo social y cómo se vincula con éste.
Se analiza tanto el aspecto general como las particularidades.
Desde un aspecto general
* Ubicación: cada parte de la hoja representa un vector y tiene un significado. Tomando la hoja en forma vertical, se divide en zona superior, que está relacionada con el mundo de las ideas, la fantasía, la imaginación, lo espiritual, etc. La zona media representa el mundo afectivo, el presente, lo cotidiano, etc. La zona inferior, el mundo instintivo, los impulsos, lo biológico, lo material, etc. La derecha está vinculada con el futuro, los proyectos, necesidad de contacto con el medio social, etc. La izquierda, con el pasado, la familia, los recuerdos, pasividad, etc.
* Dimensión: representa el nivel de expansión, autoestima, autoconfianza y vitalidad.
* Presión: representa nivel de tensión y el caudal energético.
* Trazo: se evalúa la firmeza, seguridad en la toma de decisiones y la determinación.
* Dinamismo: representa la capacidad de adaptación, flexibilidad  y afectividad.
* Claridad: está vinculado con la armonía que tiene el dibujo, su nitidez, fluidez en los trazos. No tiene nada que ver con la capacidad artística.

Desde un aspecto particular, se evalúan las distintas partes que componen el dibujo, por ejemplo:
* Partes de la casa
Techo: representa el área mental, fantasía, espiritual e intelectual.
Tejas: el control de la fantasía y tipo de pensamiento.
Chimenea: lo afectivo y sexual.
Paredes: la firmeza y sostén en la personalidad.
Puerta y ventanas: relación con el afuera, contexto social, nivel de integración, etc.
Camino: apertura, acceso a su vida íntima familiar.
Suelo: estabilidad y contacto con la realidad.

* Partes del árbol
Copa: ideas, pensamiento, autoconcepto.
Ramas: contacto social, aspiraciones y nivel de satisfacción o frustración.
Tronco: es el sostén de la personalidad, al igual que en la casa.
Raíces: está vinculado con su mundo instintivo, inconciente y necesidad de arraigo.
Suelo: contacto con la realidad y la estabilidad.

* Partes de la persona
Cabeza: inteligencia, comunicación e imaginación.
Cara: comunicación y sociabilidad.
Pelo: sexualidad, virilidad y sensualidad.
Ojos: comunicación social y percepción del mundo.
Boca: sensualidad, sexualidad, comunicación verbal y nutrición.
Nariz: símbolo fálico.
Manos: mundo afectivo, agresividad, etc.
Cuello: control de los impulsos.
Brazos: adaptación e integración con el mundo social.
Piernas: contacto con la realidad, sostén, estabilidad y seguridad.
Pies: sexualidad y agresividad.

Puntos a tener en cuenta
Al igual que en el análisis de un escrito, se efectúa un barrido e interpretación de cada una de las partes que componen el dibujo, mediante el cual se va validando o invalidando características. Dicho esto, de nada sirve copiar un modelo o tomar como premisa para efectuar un test lo que bajás de Internet. Si sos una persona con tendencia a la fantasía y creatividad por más que le pongas piso a todos y cada uno de tus dibujos, este rasgo tuyo quedará evidenciado en otra parte de tu test. Lo mejor que podés hacer es fluir y hacerlo espontáneamente.
Habitualmente, cuando la persona no es convocada para el puesto, luego de haber transitado laetapa de evaluación psicotécnicapiensa que dicha decisión está directamente sujeta a un error en su psicotécnico. La evaluación es un paso más dentro de un proceso, por lo tanto, la decisión de incorporación estará sujeta a diversas variables, en función de lo que la empresa busca y quiere para conformar su equipo de trabajo.
La estética desde un punto artístico no tiene inferencia alguna sobre el resultado del test. Es primordial que pongas atención a la consigna, evitá pararte en el “ya sé cómo se hace”. Cada etapa de este test cuenta con una consigna particular en su administración y es importante que escuches e interpretes la misma.
Por Marcela Milesi, licenciada en Recursos Humanos (USAL), Coach Ontológico certificado (ICP) y Grafóloga (Colegio de grafólogos de Bs. As). Para más información entrá a su sitio web
ENTREMUJERES


19.04.2013 | BÚSQUEDA LABORAL ¿Cómo prepararse para el examen psicotécnico? Mandaste el CV, fuiste a la entrevista, recibiste el llamado que tanto esperabas y concertaste una cita con un profesional que evaluará ciertos aspectos de tu personalidad. Aquí, todo lo que necesitás saber para enfrentar con éxito esta reunión.

Hoy en día, existen numerosos sitios de Internet que exponen las técnicas que se administran en un psicotécnico o evaluación psicolaboral e, inclusive, brindan las respuestas supuestamente correctas que el postulante tendría que brindar. Sin embargo, es conveniente aclarar que la idea que lleva a pensar que si alguien ve tal o cual cosa en una lámina de un test, o dice tal otra en otra técnica, hace las cosas bien y le van a dar el trabajo, es totalmente errónea.
La psicología es un universo mucho más complejo y no se trata de cuestiones unívocas, donde una cosa significa indefectiblemente algo puntual. La evaluación psicolaboral es un proceso y, como tal, se evalúa en forma global, donde cada una de las partes que lo componen está en concordancia con la otra. Un profesional con experiencia se da cuenta cuando el postulante da respuestas “preparadas” y sabe cómo presionar para correrlo de ese lugar y muestre aspectos más genuinos de su personalidad.
Así, es conveniente que el postulante no busque prepararse para el psicotécnico. Justamente, la recomendación es que se muestre tal cual es. Hay que tener en cuenta que el profesional no está allí para juzgar al postulante, sino para conocerlo y valorar sus capacidades para desempeñar en determinado puesto. Hay que estar dispuesto a dar lo mejor de cada uno.
Si luego del psicotécnico nos dicen que no fuimos seleccionados, no se debe pensar -como comúnmente se escucha por parte de los postulantes- que “hicimos las cosas mal”, sino que “mi perfil no era acorde al que buscaba la empresa en ese momento”.
Algunas recomendaciones a tener en cuenta al asistir a esa reunión son:
* Ir prolija y arreglada al psicotécnico.
* Manejar la ansiedad e intentar que ésta no nos domine.
* Prestar atención a las preguntas del profesional, para que no tenga que volver a repetirlas.
* No hablar de cuestiones personales que no nos hayan preguntado, ya que pueden resultar poco pertinentes al motivo del examen.
Para conocer más sobre el examen psicotécnico, seguí leyendo esta nota de Entremujeres.
Fuente: Silvana Santoro, directora del Centro de Psicología Clínica, Laboral y Forense.

19.04.2013 | BÚSQUEDA LABORAL Todo lo que querés saber del examen psicotécnico Acordaste la reunión con la psicóloga para hacer la evaluación pero todavía no sabés bien a qué vas. Les preguntás a algunas amigas cómo fue su experiencia pero todavía te quedan muchas dudas. Acá te contamos de qué se trata este encuentro y por qué lo piden las empresas.

¿En qué consiste un examen psicotécnico?
Un psicotécnico se compone de una entrevista y algunos tests de evaluación psicológica. Generalmente, se realiza una entrevista por competencias, es decir, se evalúan habilidades, destrezas y características de personalidad. Luego, esa información es contrastada con la obtenida en las técnicas. Los tests son elegidos de acuerdo a la idoneidad y criterio del profesional -en función de las competencias a evaluar- o a los ámbitos de aplicación del psicotécnico, es decir, lo que motiva su pedido.
¿Por qué se realiza un examen psicotécnico?
Existen dos situaciones que pueden motivar el pedido de un psicotécnico. Estas son las siguientes:
a) Evaluación de empleados actuales: se evalúan las habilidades de empleados que ya se desempeñan en la empresa, para desempeñar un cargo superior. Este tipo de evaluaciones es común frente a la posibilidad de ascensos y es llamada habitualmente Evaluación de Potencial.
b) Evaluación de futuros empleados: Es la más común y corresponde al ámbito de la selección de personal. Bien utilizada, es una herramienta confiable para facilitar la incorporación de un empleado a la organización.
¿Qué es lo que se evalúa en un examen psicotécnico?
En un examen psicotécnico se evalúan las capacidades laborales de una persona para desempeñarse en un puesto de trabajo determinado. En este sentido, se tienen en cuenta las características de la cultura de la organización o empresa donde se desempeñará el trabajo. Este tipo de exámenes o evaluaciones psicolaborales las lleva a cabo un profesional del área de la psicología.
Es necesario dejar en claro que no se hace una evaluación o valoración de la persona, sino que se valoran algunas variables relacionadas con su personalidad laboral. Las variables comúnmente evaluadas en un psicotécnico son:
a) Variables cognitivas o de rendimiento intelectual: tipo de inteligencia, memoria, atención y concentración, velocidad de ejecución, organización, planificación, etc.
b) Variables de personalidad: se evalúan las características de personalidad esperables en función del trabajo que va a desempeñar la persona. Algunos de los aspectos pueden ser: autonomía, liderazgo, tolerancia a la frustración, trabajo en equipo, etc.
Para conocer cómo prepararte para enfrentar el examen psicotécnico, seguí leyendo esta nota de Entremujeres.
Fuente: Silvana Santoro, directora del Centro de Psicología Clínica, Laboral y Forense.